a) Ya
entre los rabinos se leyó el libro como alegoría del amor de Yhwh por
Israel, según tradición profética. Y se repartieron sus poemas según las etapas
de la historia de Israel.
b)
Entre los cristianos el punto de arranque fue Ef 5. El libro se leyó como
alegoría del amor del Mesías Jesús a la Iglesia. A partir de la figura
colectiva de la Iglesia, se movieron en dos direcciones: el amor del Hijo de Dios
por una naturaleza humana, el amor del Mesías por miembros individuales de la
Iglesia. Entre ellos se señalan: María, las mártires, las vírgenes (en su
consagración), el alma (en figura femenina; místicos).
Creo
que hoy se puede practicar la lectura alegórica con tal de que se apoye en un
soporte firme de sentido literal.
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